
Charla: “Recordando a Xosé Tarrío González” [Sábado 3,18 h]Enero 2009. : Sábado 3 18h -
ASOCIACIÓN SOCIOCULTURAL
Según explicó un portavoz del sindicato de prisiones Acaip, en los centros penitenciarios españoles conviven actualmente 70.130 reclusos, de los que 584 se han incorporado a lo largo de las dos últimas semanas.
Andalucía y Cataluña
En cuanto a la procedencia de los reclusos, el censo de internos extranjeros alcanzó los 2.334, en 2007, lo que supone más del 75 por ciento de los 3.079 nuevos presos que ingresaron en las cárceles españolas el pasado año.
Por comunidades autónomas, Andalucía con 769 nuevos presos y Cataluña con 348, son las regiones en las que más ha aumentado la población carcelaria en los primeros cinco meses de este año, y, en cifras absolutas, también son las que más reclusos albergan en sus celdas, con 15.478 y 9.723 respectivamente.
Mientras que las comunidades de País Vasco y Navarra son las únicas autonomías donde el número de presos ha descendido en 2008, ya que en la primera cuentan con 21 reclusos menos y en la segunda con uno.
Con respecto a las tasas de hacinamiento en los centros penitenciarios, un dato que se entiende como la relación que existe entre la población reclusa y el número de celdas en las que estos viven de forma continuada dentro de estos centros, el centro penitenciario de Málaga está a la cabeza de España, con una tasa del 235,72 por ciento , lo que significa que cuenta con 1.973 internos y 837 celdas funcionales.
http://www.derechopenitenciario.com
560 de los reclusos tienen algún tipo de trastorno psicológico para el que no toman sus medicinas. Según han denunciado los trabajadores de Villabona, deberían vivir en un centro especializado.
La diputada regional del PP, Elma Alonso ha denunciado hoy que el centro penitenciario de Villabona incumple la normativa vigente pues carece de un plan de emergencias "cada vez más necesario" ante el aumento de un 12% de los reclusos en los últimos años.
En rueda de prensa Alonso ha anunciado que su grupo presentará una proposición no de ley instando al Gobierno regional a que solicite la elaboración de un plan de emergencias al Ministerio del Interior, competente en la materia, encaminado a evitar accidentes que "pueden ser muy graves".
A su juicio, la prisión tiene graves problemas ya que el aumento de reclusos que está experimentando no va acompañado de un aumento de funcionarios "llegando a tener dos vigilantes para 150 presos".
Alonso ha aseverado que el centro penitenciario de Villabona podría estar operativo con 1.300 presos, cifra que se rebasa en la actualidad con 1.502 reclusos registrados lo que "genera un caos en la actividad de la cárcel".
A esto se une la circunstancia de que 560 de los reclusos tienen algún tipo de trastorno psicológico para el que no toman sus medicinas y que, según han denunciado los trabajadores de Villabona, deberían vivir en un centro especializado.
Por otro lado, Alonso ha señalado que las actuaciones de prevención deberían aplicarse también en otros campos como el medio ambiente. En este sentido, ha manifestado que el entorno natural de Redes no dispone de un parque de bomberos, cuya creación ha sido solicitada por el PP en el pleno de la Junta General del Principado.
La voz de Aviles560 de los reclusos tienen algún tipo de trastorno psicológico para el que no toman sus medicinas. Según han denunciado los trabajadores de Villabona, deberían vivir en un centro especializado.
La diputada regional del PP, Elma Alonso ha denunciado hoy que el centro penitenciario de Villabona incumple la normativa vigente pues carece de un plan de emergencias "cada vez más necesario" ante el aumento de un 12% de los reclusos en los últimos años.
En rueda de prensa Alonso ha anunciado que su grupo presentará una proposición no de ley instando al Gobierno regional a que solicite la elaboración de un plan de emergencias al Ministerio del Interior, competente en la materia, encaminado a evitar accidentes que "pueden ser muy graves".
A su juicio, la prisión tiene graves problemas ya que el aumento de reclusos que está experimentando no va acompañado de un aumento de funcionarios "llegando a tener dos vigilantes para 150 presos".
Alonso ha aseverado que el centro penitenciario de Villabona podría estar operativo con 1.300 presos, cifra que se rebasa en la actualidad con 1.502 reclusos registrados lo que "genera un caos en la actividad de la cárcel".
A esto se une la circunstancia de que 560 de los reclusos tienen algún tipo de trastorno psicológico para el que no toman sus medicinas y que, según han denunciado los trabajadores de Villabona, deberían vivir en un centro especializado.
Por otro lado, Alonso ha señalado que las actuaciones de prevención deberían aplicarse también en otros campos como el medio ambiente. En este sentido, ha manifestado que el entorno natural de Redes no dispone de un parque de bomberos, cuya creación ha sido solicitada por el PP en el pleno de la Junta General del Principado.
La voz de Aviles
Desde el punto de vista de la organización sindical, la puesta en marcha de este centro conllevaría la creación de un importante número de puestos de trabajo, tanto directos como indirectos en Asturias.
El sindicato considera que los alrededores del centro penitenciario de Villabona podrían ser una buena ubicación para el psiquiátrico, de acuerdo a los requisitos establecidos por el actual reglamento penitenciario. CSIF propugna que se establezcan contactos entre la Administración Penitenciaria, la Consejería de Sanidad y la de Justicia, de cuyas gestiones podría resultar el compromiso de creación de este centro.
También entiende que la actual distribución territorial de las actuales instalaciones psiquiátricas penitenciarias no favorece la rehabilitación de los enfermos a través del arraigo en su entorno familiar. CSIF opina que es una necesidad evidente la vuelta a los psiquiátricos penitenciarios, opinión corroborada por reputados especialistas.
www.lanuevaespaña.com
Por ello, citamos directamente al Defensor del Pueblo Andaluz, que consideramos una fuente bastante poco sospechosa de radicalidad.
El Infome sobre los Centros para Menores con Trastornos de Conducta tiene menos de un año (Noviembre de 2007), y es plénamente vigente.
Insertamos algunas de las frases que más llaman la atención, pero puedes acceder al texto completo aquí:
http://www.defensor-and.es/informes_y_publicaciones/informes_estudios_y_resoluciones/informes_especiales/informe_0018/informe_0018.html
En los centros cerrados de Madrid, salvo en La Jarosa de la Fundación O´Belén (clausurado tras nuestra campaña de denuncia) las condiciones no son tan extremas.
Sin embargo, aunque el aislamiento en centros como Los Robles o Teresa de Calcuta es algo menos cruel, continúa siendo una forma de tortura.
Extractos del informe:
(...) entre los castigos o sanciones más frecuentemente utilizadas en estos centros se encuentran las denominadas de “separación de grupo” y “tiempo fuera”.
(...) la sanción de “separación del grupo” suponía para el menor la reclusión durante un determinado espacio de tiempo en un lugar específico (...) en los tres casos visitados se caracterizaban por ser pequeños cubículos, cuyas reducidas dimensiones impedían al menor sancionado permanecer tumbado en los mismos o caminar más de dos pasos en cada dirección. Estaban ubicados en el exterior de los centros o en patios interiores de los mismos, lo que dejaba a los menores sancionados sometidos a las inclemencias meteorológicas.(...)
(...)Un habitáculo de hormigón cerrado por una puerta de hierro con una pequeña ventana enrejada que permitía el paso de la luz y también, obviamente, del calor y del frío. En estos habitáculos son recluidos los menores que cometen infracciones graves contra las normas de convivencia por periodos de tiempo que oscilan entre unas horas y varios días. Algunas de las menores internadas en unos de estos centros, a las que entrevistamos en el curso de las visitas de inspección, nos manifestaron que habían conocido casos de menores sancionadas con hasta 7 días de reclusión en estos habitáculos. Los responsables del centro negaron la veracidad de esta información y señalaron que las sanciones no duraban nunca tanto tiempo. Durante el periodo de cumplimiento de la sanción de “separación de grupo”, el menor no puede abandonar el cubículo salvo para hacer sus necesidades, para comer o para dormir, retornando al mismo a la mañana siguiente. La alimentación –según nos explicaron las propias menores- se reducía respecto de la habitual, ya que se suprimían los bocadillos de media mañana y media tarde, al parecer por considerar la dirección del centro que resultaban innecesarios al existir un menor consumo de energías en la menor por la reclusión.
(...) la dependencia en cuestión tenía las paredes de hormigón liso, sin ningún tipo de acolchamiento que pudiese evitar los daños derivados de actos autolesivos de los menores encerrados durante los periodos de agresividad incontrolada. En todas las reuniones con los responsables de esos centros especificamos claramente nuestra total disconformidad con este tipo de sanciones y nuestra consideración de que estos habitáculos debían desaparecer. En lo que se refiere al resto de dependencias del centro, como hemos reseñado anteriormente, no presentaban diferencias con las propias de cualquier centro de protección, siendo generalizada la existencia de salas específicas para reuniones y terapias de grupo, así como la existencia de espacios de uso educativo, talleres formativo y lugares de ocio y esparcimiento.
http://www.centrosdemenores.com/